sábado, 15 de agosto de 2009

La libertad que te hace libre



Has pensado alguna vez en buscar sentido a tu vida, a tu trabajo, a tu matrimonio. Muchos se preguntan: ¿Cuál es mi razón de vivir? ¿Por qué tengo que sufrir? ¿Por qué estoy con esta persona si no me siento bien con ella? ¿Por qué estoy endeudado? ¿Cómo me pasó esto a mí? Por qué las mismas rutinas? Porqué una vida sin emociones? Porqué no me siento completo? Porqué las tristezas y los vacíos? Porqué mi vida tiene que girar alrededor de los demás? En fin, vivimos haciéndonos muchas preguntas acerca de la vida, lo ingrato que ha sido la vida con nosotros. Los sueños que han quedado en el camino, etc. No llegamos a entender que tenemos la llave para salir en libertad, la razón es que somos prisioneros y carceleros de nuestros pensamientos. Todos los problemas lo hicimos o creamos con un nivel de pensamiento, para cambiar el problema o solucionarlo necesitamos cambiar nuestros pensamientos.
La famosa frase de Jesús : “y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres” es toda una clave de sabiduría. Muchos lo conocen pero lo que no conocen realmente es lo que significan esas palabras.
Cuando tú conoces la verdad, no debes seguir viviendo en esclavitud. La verdad te ayuda a construir el futuro que estás soñando. Es un asunto de actitud, la actitud de vivir libre sin temor y en ella juegan un papel muy importante nuestras creencias. ¿Qué es lo que creo? Lo que yo creo afecta mi conducta, mi forma de ser, mi forma de relacionarme con los demás.
¿Cuáles son mis creencias? Una creencia puede ser generadora de posibilidades: “Yo puedo”, o limitante: “no puedo”. Lamentablemente las personas suelen encarcelarse mas en esta última, siendo cegados a todo el potencial que hay dentro de cada uno. Nuestras creencias las aceptamos como verdaderas pero las creencias se pueden cambiar. Lo que tú conoces o lo que tú estás viviendo lo puedes cambiar. Según como pienso, estaré creando experiencias positivas o negativas. Optemos por crearlas generadoras de poder. Nuestra mente acepta cualquier cosa que nosotros decidamos creer. Solo son pensamientos, ideas y podemos manejarlos a voluntad, Dios te creo a ti con esa capacidad, él no hizo de ti un robot o una marioneta.
“Si no está en tus manos cambiar una situación que te produce dolor, siempre podrás escoger la actitud con la que afrontes ese sufrimiento.” Viktor Frankl
Las personas deberían procurar alcanzar un temple esperanzador sobre la capacidad humana de trascender sus dificultades con dignidad, a través del descubrimiento de un sentido para sus vidas. Al descubrir su verdad conveniente y orientadora, el hombre no sólo encuentra un sentido a su vida, sino que descubre qué es lo que la vida espera de él. Descubrir tu verdad, es no ser prisionero ni carcelero de tus pensamientos, es darle un sentido a tu vida cuando cambias tu actitud y tu manera de pensar. ¿Estás dispuesto a cambiar tu actitud y tus pensamientos? ¿Vas a seguir en ese campo de concentración? El campo de concentración donde muchos están tratando de sobrevivir es su mente.
Tú puedes ser libre si decides creer en ti mismo, en ser autosuficiente, en separar tu vida de la vida de los demás, porque tu vida es tuya, nadie puede vivirla por ti, ni tu padre, ni tu madre, ni tu pareja, ni tus hijos, nadie puede vivirla, es tu propio desafío, no lo puedes evitar y tú eliges como vivir, si como esclavo, dependiente, sometido a una persona o una familia o en plenitud y libertad, siendo dueño de tus actos, decidiendo cada paso de tu vida, compartiendo sí, participando sí, pero libre porque solamente tú tienes las llaves para salir en libertad. Solo tienes una vida, dejarás que otros decidan cómo la tienes que vivir, aunque sean tu familia? Te convertirás en un fracasado, dominado, débil? Tienes derecho a tener tus propios espacios. Te los deben respetar. No eres menos ni mas que tu pareja. Tienes derecho a tomar tus propias decisiones, te lo deben respetar. Tienes derecho a cometer tus propios errores, te lo deben respetar. Tienes derecho a disfrutar de todo lo que te hace bien, también te lo deben respetar. No crees que es hora de empezar a ser tú mismo?.
Te ha pasado que alguna vez te preguntaste:”sí, estoy bien, tengo de todo , tengo una buena persona de pareja, tengo una linda familia, pero no soy feliz”. Por que? Será porque no tengo libertad de ser yo mismo? será porque me agobian los deberes a la familia? Será porque todos se han hecho dependientes de mí? Será porque me consagré a la institución matrimonial y los hijos pero el amor quedó en el camino? Será porque no tengo mis propios espacios? Será porque he caído en la costumbre, me he vuelto un esclavo y se ha perdido el “sabor” de la vida? Muchos interrogantes, pero un solo culpable: tú. Tú que has dejado de ser tú mismo, tú que has permitido que avasallen tu libertad y anulen tu personalidad. Y ahora? Con algunos años a cuesta te das cuenta de lo que pasa y te cuesta desprenderte de todas esas capas que se han tejido sobre ti inmovilizándote y oscureciendo tu existencia, encerrándote en una rutina pesada y sin sentido, no permitiéndote ver la verdadera luz del sol. No puedes ni debes permitir que eso siga ocurriendo. No crees que es hora de empezar a ser tú mismo? No crees que es hora de empezar a vivir la vida que tú quieres y mereces vivir? Ya has hecho mucho por los demás, ya has criado hijos, has soportado una pareja, ya has cumplido, está bien hecho está pero ahora es tu turno de poner a cada cual en su lugar, hijos a ser autosuficientes y no tan demandantes, parejas igualmente y si no entienden o se termino el amor, allá ellos que sigan su ruta y a otra cosa! Siempre se puede volver a empezar en el amor. También puedes cambiar de trabajo, estudiar, comenzar un nuevo emprendimiento, un cambio en la indumentaria, un nuevo estilo de vida, redecorar tu casa, una nueva vida social, una nueva ciudad , etc.
No hay dinero, ni posesiones materiales, ni personas, que te puedan devolver la libertad y la felicidad que te pertenecen legítimamente; está en ti recuperarlas y orientar tu camino hacia una vida plena. Está en ti liberarte y empezar a vivir realmente siendo dueño de tus actos, solamente tienes que pensar y decidir un cambio de actitud y la toma de decisiones propias orientadas a vivir una nueva y luminosa existencia. Y si lo haces con convicción y la seguridad que te da el estar en el camino correcto todos los que te rodean tendrán que aceptarlo y respetarlo. Esto no cambia para nada tus afectos hacia tu familia, ni los de ellos hacia ti una vez que lo entiendan; pero sí cambia tu vida que empieza a tener sentido, que empieza a reencontrarse con el amor, la paz interior y el verdadero camino a la felicidad.

domingo, 2 de agosto de 2009

Las casualidades...


No hay casualidades, hay causalidades, nada pasa porque sí, todo tiene un porque ; las cosas que nos suceden son necesarias para que aprendamos y cuando nos golpeamos y nos golpeamos es porque no aprendemos la lección; estamos contraviniendo leyes eternas, queriendo ser más sabios que el Universo, queriendo hacer cosas que no tienen que ser y desoyendo las señales que se nos dan para que rectifiquemos el camino y progresemos. No siempre lo que nuestro pensamiento materialista nos hace creer es progreso, realmente; es mas recomendable afinar el oído a los susurros del espíritu y no olvidarnos que somos seres espirituales viviendo una experiencia de vida y por tanto si queremos encontrar el camino a la paz y la felicidad tenemos que buscarlo a partir de ello. Pero, claro, la vida actual hace cada vez mas difícil saber qué hacer, nos agobian los problemas, nos bloqueamos, la soledad, el vacío que la gente nos hace cuando estamos mal, las depresiones toman posesión de nosotros y cada día estamos peor, desconectados del espíritu, enfermando el cuerpo y la mente. Los sueños se desvanecen, la vida se convierte en un calvario, perdemos la dimensión de lo que somos, nos denigramos , cerramos las puertas a las verdaderas oportunidades y atraemos todo lo negativo que se nos cruza en el camino. Y puedo aferrarme a mis sueños, como me aferro a mis realidades como me aferro a mis relaciones. Cuando la realidad me demuestra que esto no va a suceder, es como si algo muriera y como con las personas, tiendo a quedarme aferrado a esta fantasía. Igual que con las realidades, lo mismo que con los hechos, hace falta soltar. Pero para esto tengo que aceptar que el mundo no es como yo quiero que sea, y esto implica un duelo para elaborar. Tengo que aceptar que el mundo es como es y amigarme con el hecho de que así sea. Tengo que aceptar que mi buen camino no pase quizás por tener todo lo que deseo. Quizás pase por donde ni siquiera imaginé. Pero si no me animo a soltar la soga de un sueño no podré seguir mi ruta hacía mí mismo. Madurar siempre implica dejar atrás algo perdido, aunque sea un espacio imaginario, y elaborar un duelo es abandonar uno de esos espacios anteriores (internos o externos), que siempre nos suena más seguro, más protegido y aunque más no sea, más previsible. Y cuando puedo llegar a darme cuenta de eso, puedo recuperar la alegría de estar vivo. Porque estar vivo significa poder sostener vivo a este otro que vive en mí. La vida es la continuidad de la vida, más allá de la historia puntual, cada momento se muere para dar lugar al que sigue, cada instante que vivimos va a tener que morirse para que nazca uno nuevo, que nosotros después vamos a tener que estrenar. Hace falta estrenarse una nueva vida cada mañana si es que uno decide soportar la pérdida. Pero si seguís llevando la anterior, la anterior y la anterior, tu vida se hace muy pesada. Y no tiene que serlo, la vida es para vivirla, no para dejarla pasar. Quién puede decir que vivirá o morirá mañana? Tienes tu ayer contigo? No. Tienes tu futuro contigo? No. Tienes solamente hoy! Si miras para atrás, años y años de sufrimiento y qué? En qué ha cambiado tu existencia desde esos años? Donde está el progreso, la paz, el éxito y la felicidad? Todo sigue igual, entonces, puede ser que sea necesario pensar en que algo no anda bien y se necesita reflexionar profundamente sobre que cambios hacer para no seguir en el eterno círculo en el que estás metida. A todos nos pasa o nos ha pasado algo similar, durante años caminamos y recaminamos el mismo camino, tropezamos con los mismos obstáculos una y otra vez y no podemos ver que hay otros caminos que podrían ser la verdadera ruta. A todos nos cuesta, aceptar que estamos equivocados, enmendar los errores o rectificar el rumbo. Muchas veces pague con dolor y sufrimiento esos errores, no me lo contaron, lo viví. Sigo pagando, sigo sufriendo aún por cosas del ayer, aunque estoy aprendiendo a vivir mejor y ya no cargo las mochilas del pasado; apenas las del presente son suficientes. Fué necesario el dolor más grande, ése que no se puede contar para que pudiera entender muchas cosas, para escuchar a mi espíritu, para ser más humilde, para purificar y henchir de amor mi corazón y tener la fuerza de diez para soportar todas las cosas, No me importa lo que el mundo diga o haga, no me importan las reglas con que me quieran juzgar, no me interesa que me critiquen o me aplaudan, no me importan los preconceptos estructurados, yo sólo tengo un código, ser fiel a mi corazón. por lo que siento, vivo y trato de ser feliz. Los seres humanos necesitamos evolucionar, como el agua si nos estancamos perdemos calidad. Los amigos, la familia tampoco son una casualidad, hay algo mas detrás de todo. Nada de lo que nos sucede es casual, todo tiene un porqué. A veces nos damos cuenta de ello, otras no lo entendemos hasta que pasa algún tiempo.La espera de la llegada de la pareja ideal a veces es casi un imposible, sin embargo hay una persona esperando por tí en alguna parte del mundo, a veces está muy cerca nuestro solo que no sabemos ver, otras veces aparece cuando menos le esperamos pero le reconocemos porque parece que le conociéramos de toda la vida. Que nos comprende, que nos hace sentir cuánto nos ama, que fué hecha para nosotros.Y esto tan maravilloso...no puede ser casualidad.

sábado, 1 de agosto de 2009

Yo y la Política.

Me metí en la política por dos razones, una para ayudar a la gente de mi pueblo, la otra para hacer un poco de oposición a los corruptos y demostrar que la política puede ser muy buena cuando esta trabajada por buenas personas.Es difícil ser un buen político, todo está muy contaminado en este medio.Lo que no puedo soportar es que tenga que ser hipócrita, que tenga que engañar, que tenga que venderme, eso si no es para mí, yo jamas me vendí a nada ni a nadie; siempre sigo lo que me dicta el corazón y fue así que sentí que no podía estar en ese medio y me fui en una época. Al tomar esa decisión me sentí bien, pero no pude quedarme tranquilo por mucho tiempo porque cuando veo las barrabasadas que hacen algunos políticos me siento tan mal que quiero hacer algo y para hacer algo para cambiar las cosas no queda otra que trabajar en política para el lado de los que nos parecen más honestos. Hay que participar para ayudar a los cambios, sea militando en una corriente política, sea con el voto bien pensado.Pero algo hay que hacer, no se puede desentenderse de todo, vivir quejandose de los gobernantes no es suficiente, no sirve de nada; la gente debería participar más, informarse más y decidir con el voto la suerte de los gobernantes.Cuando hay que castigar el mal desempeño y cuando hay que premiarlo.Hay que ejercer los derechos que nos da la Democracia.Se pueden hacer muchas cosas desde organizaciones no gubernamentales, desde los barrios, etc. Yo creo que si la gente fuese más unida en este país muchas cosas cambiarían.No pasa por esperar que venga todo de los gobernantes, también hay que hacer desde el pueblo. Como dijo Kennedy:"No pienses en lo que el país puede hacer por tí, sino en lo que tú puedes hacer por el país".

Cambiar o no cambiar?

Todos en alguna época de nuestras vidas necesitamos hacer cambios, algunos pocas veces,otros muchas. Algunos sin embargo viven una vida rutinaria, es el caso de algunos están en su empleo años y años, siempre igual, la misma rutina todos los días, los 365 días del año, el mismo empleo, los mismos compañeros, las mismas rabietas, la misma casa,el mismo barrio, la misma pareja que ya no soportan, los mismos vecinos, las mismas reuniones, todo así...criaron a sus hijos, y ya solamente esperan la jubilación, como que ya esta todo hecho.La vida está cumplida. No digo que este mal, tal vez deba ser así, pero yo nunca pude entender eso, para mí progresar es cambiar, nuevos desafíos, nuevas metas, nuevas experiencias, claro, no puedo hablar mucho de hogar y familia, porque el único hogar y familia que yo conocí fue el de mis viejos, que lindo que era cuando tenia a mi mamá; pero la vida sigue y alguna vez todo debe terminar para dar paso a cosas nuevas.
Lo que sí me parece una barbaridad soportar una pareja durante años sin amor, por costumbre, por los hijos, por el que dirá la familia y otras excusas justificativas para ocultar una realidad que es la vida rutinaria, vacía, sin las emociones y el fuego del amor, sin la renovación de lugares y desafíos. Lo que piense la familia y la gente, la aprobación o no de ellos no solucionan los problemas de soledad, desamor y aburrimiento de las relaciones desgastantes.Si en algo se ha evolucionado en los tiempos modernos es que la gente cada día soporta menos la vida de pareja sometida,inmersa en la rutina por acostumbramiento. La pareja moderna ya cada vez menos acepta la mala convivencia.
Hay que evolucionar en cuanto a lo que es bueno y saludable,si estar en pareja significa vivir estresado e incómodo prefiero nada, como dice el dicho:"mejor solo que mal acompañado".La pareja tiene que ser un verdadero oasis de paz, comprensión y cariño constante sino no sirve.Lo sé por haberlo pasado tener que desear no volver a la casa para no encontrarme con la otra persona, es muy triste eso. Tendría que ser lo opuesto, no ver la hora de volver para encontrarme con la persona adorada.
Sin embargo, hay personas que soportan esta situación por años y años, conscientes de que deberían poner coto a esto pero sin el valor para hacerlo. Una separación después de tanto tiempo? Es como que no sabrían como afrontar una nueva vida solos, un volver a empezar.Pero, siempre se puede volver a empezar, siempre.